MacBook Pro reacondicionado con Retina de 15,4", Intel Core i9 de ocho núcleos a 2,4 GHz y Radeon Pro Vega 20 - Gris espacial

El MacBook Pro redefine el significado de potencia y portabilidad. Da igual dónde te lleve tu imaginación: con procesadores y memoria de alto rendimiento, gráficos avanzados, almacenamiento ultrarrápido y mucho más, harás realidad tus ideas en tiempo récord.

El MacBook Pro tiene una potencia de cálculo increíble gracias a los últimos procesadores Intel Core. El modelo de 15" ahora está disponible con un Intel Core i9 de ocho núcleos de novena generación que alcanza velocidades Turbo Boost de hasta 5 GHz. Eso se nota en apps para gráficos en 3D como Autodesk Maya, con velocidades de renderización un 40 % más rápidas que con el procesador de seis núcleos de la generación anterior y hasta el doble de rápidas que con un procesador de cuatro núcleos.²

El MacBook Pro de 15" incorpora una GPU independiente Radeon Pro con una potencia y eficiencia energética descomunales. Además, hemos combinado cada GPU con 4 GB de memoria GDDR5 estándar para darte un rendimiento fluido en los trabajos más exigentes, como renderizar títulos 3D en Final Cut Pro X.

El MacBook Pro viene con el T2 Security de Apple, un chip de silicio de segunda generación diseñado a medida para el Mac. Este chip incluido en los modelos de 13 y 15" con Touch Bar mejora la seguridad del MacBook Pro, ya que incorpora un coprocesador Secure Enclave que se utiliza en las funciones de almacenamiento cifrado y arranque seguro. Además, integra varios controladores independientes, como el de gestión del sistema o los controladores de audio y SSD, y permite que Siri esté siempre disponible para abrir apps, reproducir música o responder a tus preguntas cuando dices «Oye Siri».

Thunderbolt 3 combina su increíble ancho de banda con la versatilidad del estándar USB‑C para crear un puerto universal que alcanza velocidades de vértigo de hasta 40 Gb/s. Ofrece transferencia de datos, carga y salida de vídeo en un único conector con el doble de ancho de banda que la generación anterior. Ambos tamaños del MacBook Pro están disponibles con dos puertos a cada lado para que elijas el que mejor te venga en cada momento. Puedes conectar sin problemas los dispositivos que ya tengas con un cable o un adaptador. Y como el puerto Thunderbolt 3 es reversible, no importa cómo lo pongas. Siempre acertarás.

La Touch Bar sustituye las teclas de función que normalmente ocupan la parte superior del teclado por algo mucho más práctico y versátil. Ahora, según lo que estés haciendo, aparecen las herramientas adecuadas que ya sabes usar. Tienes a tu alcance controles del sistema como el volumen y el brillo, formas interactivas de ajustar o recorrer tu contenido, prestaciones inteligentes de escritura como los emoji y el texto predictivo, y mucho más.

El teclado del MacBook Pro incluye un mecanismo de mariposa que multiplica por cuatro la estabilidad de las teclas respecto al mecanismo de tijera tradicional y mejora la comodidad. Los modelos de MacBook Pro de 13 y 15" con Touch Bar tienen un nuevo teclado que hace menos ruido al teclear. Y como el trackpad Force Touch es tan amplio, cuentas con espacio suficiente para todos tus gestos y clics.

Detrás de cada Mac está la potencia de macOS, un sistema operativo que te permite hacer cosas impensables en cualquier otro ordenador. La razón es muy sencilla, macOS se diseñó para el hardware en el que está instalado, y viceversa. Viene con un montón de apps extraordinarias y, gracias a iCloud, se asegura de que las fotos, los documentos y todas tus cosas se sincronicen en todos tus dispositivos. Por eso tu Mac se entiende a la perfección con el iPhone. Además, está pensado para proteger tu privacidad y tu seguridad.

El MacBook Pro de 15 pulgadas ofrece dos opciones de GPU Radeon Pro Vega, las primeras GPU móviles independientes Vega en un portátil. Las GPU Vega tienen la misma arquitectura gráfica que el iMac Pro, con un motor de cálculo mejorado y memoria HBM2, que duplica el ancho de banda disponible para la GPU y consume muchísimo menos, dejando más energía para la propia GPU. El resultado es que el rendimiento gráfico es significativamente más rápido —hasta un 60 % superior al de la Radeon Pro 560X— a la hora de procesar las tareas de vídeo, 3D, renderizado y cálculo más exigentes.