Potencia para cambiarlo todo.
El Mac más radical lleva el rendimiento, la capacidad de ampliación y las opciones de configuración a un nivel desconocido. Profesionales, ya está aquí la herramienta para desafiar los límites de lo posible.
Hasta 28 núcleos. Creatividad sin límites.
El Mac Pro está orientado a los profesionales que necesitan una CPU de máximo rendimiento. Renderizar para producción, tocar cientos de instrumentos virtuales, simular una app de iOS en varios dispositivos a la vez… Este Mac puede con todo. Incluye más núcleos que nunca, hasta 28 con el procesador Intel Xeon. Y gracias a la gran memoria caché de nivel 2, la caché compartida de nivel 3 y los 64 carriles de PCI Express, ofrece un ancho de banda monumental tanto de entrada como de salida.
Pensado para darlo todo. Todo el tiempo.
Exprimir hasta el último ápice de rendimiento del procesador supone tener que darle mucha, mucha potencia. En este caso, más de 300 vatios. Un disipador térmico enorme mantiene el sistema refrigerado para que pueda pisar a fondo el tiempo que haga falta. Los tubos de calor alejan el aire caliente del chip y lo dispersan a través de unas aletas de aluminio. Y tres ventiladores axiales hacen circular el aire por todo el sistema.
Olvida todo lo que sabes sobre la memoria.
Para un procesador multinúcleo, mucha memoria puede ser poca. El Mac Pro, que incluye seis canales de memoria ECC ultrarrápida y doce ranuras DIMM físicas, admite hasta 1,5 TB de memoria. Si tienes que trabajar en proyectos grandes, analizar conjuntos de datos enormes o ejecutar a la vez varias aplicaciones profesionales, esta es tu mejor baza para agilizar cualquier tarea. Y mientras que las torres convencionales esconden la memoria en sitios inaccesibles, el Mac Pro te la pone en bandeja en una placa base de doble cara.
Chip T2 Security de Apple.
Los datos del Mac Pro están protegidos por el chip T2 Security de Apple, que integra un coprocesador Secure Enclave y controladores independientes en un solo chip. Además, se asegura de que los programas de bajo nivel no se manipulan y que solo se carga el software de sistema operativo autorizado por Apple.
Ocho ranuras de expansión PCI Express. Ocho veces más configurable.
El Mac Pro está diseñado para los profesionales que buscan sistemas con gran ancho de banda. Tiene cuatro ranuras de ancho doble, tres ranuras de ancho simple y una ranura de longitud media preconfigurada con la tarjeta de E/S de Apple. En total, el doble de ranuras que la torre Mac anterior. Personaliza y amplía tu configuración como nunca antes en un solo equipo.
Diseñado para rendir al máximo.
Muchos profesionales no pueden trabajar sin una arquitectura gráfica de alto rendimiento. Sobre todo cuando se dedican a la animación de vídeos 3D, la composición de escenas 8K o la creación de entornos de videojuegos hiperrealistas. Para darles un rendimiento y una potencia gráfica a la altura de sus necesidades, Apple tenía que inventar algo revolucionario. Y así surgió el módulo de expansión MPX para el Mac Pro.
Un segundo conector. El primero de la industria.
El módulo MPX toma como punto de partida un conector PCI Express estándar. A partir de ahí, por primera vez en una tarjeta gráfica, se crearon carriles PCIe adicionales para integrar Thunderbolt y proporcionar mayor potencia y capacidad. Con hasta 500 vatios, el módulo MPX alcanza una potencia equivalente a todo el Mac Pro de la generación anterior.
Frío. Silencioso. Y capaz de todo.
Casi ninguna GPU está concebida como parte de un sistema, por lo que suelen llevar su propio sistema de refrigeración. El módulo MPX es la excepción que confirma la regla, ya que está diseñado como un componente integrado del Mac Pro. Su forma permite alojar un disipador térmico más grande, que funciona junto con el flujo de aire interno del equipo para disipar el calor de forma silenciosa. Y como no lleva un ruidoso ventilador aparte, los niveles de calor y de decibelios son muy bajos.
Acceso de 360 grados.
Un único punto de entrada no era suficiente. Por eso, puedes quitar la carcasa de aluminio y tener acceso total al sistema. La placa base es de doble cara para que te resulte más fácil añadir y extraer componentes. El procesador, la tarjeta gráfica y las ranuras de expansión en un lado. El almacenamiento y la memoria, en el otro. Cuando quieras personalizar tu Mac Pro, él estará más que dispuesto.
Dos lados. Una sola meta.
El rendimiento extremo del Mac Pro requiere un sistema térmico superpotente. Tres ventiladores axiales hacen circular el aire a través de la CPU y las GPU de forma silenciosa para mantenerlas bien refrigeradas incluso con las cargas de trabajo más intensas. En el lado opuesto, un extractor aspira el aire que pasa por la memoria, el almacenamiento y la fuente de alimentación, y lo expulsa por la parte trasera del equipo.
Diseñado de dentro hacia fuera.
Con tres piezas de aluminio forjadas y mecanizadas para formar un único cuerpo, la carcasa es mucho más que una cubierta decorativa. Aporta rigidez a la estructura y actúa como un firme sello para la cavidad interna. Junto con los ventiladores, el extractor y los conductos internos, crea zonas con distinta presión para maximizar la capacidad térmica del sistema.
Apple Afterburner. Vídeo 8K supersónico.
Afterburner se ha diseñado para transformar el flujo de trabajo de los profesionales del cine y el vídeo. Ahora puedes ir directamente de la cámara a la línea de tiempo y trabajar en archivos nativos con 4K e incluso 8K desde el principio. ¿Recuerdas las eternas transcodificaciones, el espacio malgastado y los errores de exportación? Pues ya te puedes ir olvidando. Trabajar con contenido proxy es vintage. Afterburner te vendrá preinstalada en una ranura PCI Express 5 (x16) para que puedas sacarle el máximo rendimiento.
La creatividad pasa a primer plano.
Afterburner es una tarjeta aceleradora de hardware creada con una matriz de puertas programables en campo (FPGA), o ASIC programable. Tiene más de un millón de celdas lógicas, lo que le permite procesar hasta 6.300 millones de píxeles por segundo. Al instalarla en el Mac Pro, el sistema puede gestionar hasta seis secuencias de ProRes RAW 8K o 23 secuencias de ProRes RAW 4K. De este modo, los núcleos están libres para ejecutar más procesos y efectos creativos.